El Prolapso Genital es el descenso a través de la vagina de sus paredes y en ocasiones también de los órganos pelvianos. Hay diversos tipos y grados de severidad. Por lo general, la mujer lo identifica como una sensación de peso en los genitales; o bien, por la presencia de un aumento de volumen que se evidencia con los esfuerzos.

Este puede ser Anterior (Cístocele), Posterior (Rectocele), Uterino o las combinaciones de estos.
Gracias a la combinación de las técnicas clásicas a las que se suman modificaciones modernas y el uso de mallas en el tratamiento del Prolapso tal como en las Hernias Abdominales han disminuido los fracasos quirúrgicos que llegaban al 30% a los 5 años a menos de un 5%.

En la actualidad la Cirugía de Prolapso Genital se apoya fundamentalmente en cuatro pilares:

 

 
Conocimiento anatómico funcional del suelo pelviano
Técnicas de reparación sitio específicas
Uso de sistemas de suspensión sintéticos o biológicos, llamados mallas, ancladas en sitios fijos para sostener órganos tan importantes como vejiga, recto y útero.
Experiencia clínica

Estos fundamentos permiten realizar una cirugía reparadora anatómica y funcional con excelentes resultados. Los procedimientos se realizan por vía vaginal y son de recuperación muy rápida y sin dolor.